Siete olmedo®

¿QUÉ HACER PARA QUITARLE EL BIBERÓN A TU HIJO?
Lic Maria Elena Anaya Meneses

Por: Lic. Maria Elena Anaya Meneses

Mi hijo ya tiene cuatro años y aun toma la leche en biberón, ¿Cómo le hago para retirárselo?, es una de las preguntas que la mayoría de los padres se plantea; parece que ésta es una situación difícil para todos.

    Pero ¿Por qué conviene que los niños dejen el biberón antes de los tres años? Por una parte, están los motivos psicológicos. Si tu hijo es el único de la clase que lleva su biberón a todas partes, puede sentirse desplazado y es posible que incluso sufra las burlas de otros compañeros.

   Además, para desarrollarse adecuadamente, sin miedo a crecer y hacerse más independiente, el niño debe sentir que es mayor, que ya no es un bebé y esto es fundamental que se lo trasmitas tú con tu forma de tratarlo.

   Por otro lado, están las cuestiones de salud. Tener el biberón continuamente en la boca puede deformar el paladar y dificultar el habla. También puede favorecer las caries, ya que el azúcar que contienen algunos alimentos, como los zumos, se queda en el chupón y está en continuo contacto con los dientes.

    Es importante que papá o mamá no se acostumbren a ofrecer el biberón cada vez que llora o se enfada. Si esto sucede, él niño terminará asociándolo con una forma de consuelo y le costará mucho más trabajo dejarlo.

   Es común ver niños de 3 o 4 años que beben perfectamente en vaso pero, ante el más mínimo disgusto, lloran desconsolados en busca de su biberón.

   Aprender a beber en vaso no es tan sencillo para un niño pequeño. Al principio, lo inclinan demasiado de prisa, se atragantan, les da tos y se mojan la ropa. Pese a esta dificultad, los niños de dos años ya dominan bastante bien este aprendizaje.

Para que se acostumbre a no usar biberón toma en cuenta lo siguiente:

  • Empieza ofreciendo el vaso entrenador en vez del biberón en todas las comidas.
  • Da el vaso entrenador para acompañar cada alimento nuevo que le ofrezcan.
  • Si le ofreciste el vaso entrenador con un determinado alimento, y te lo aceptó, siempre dáselo cuando vuelva a comer.
  • Todos los miembros de la familia tienen que estar involucrados y entusiastas.
  • Ve desapareciendo el biberón poco a poco.
  • Si te pide el biberón, ofrécele mejor el vaso entrenador, y apapáchalo si lo necesita.
  • Sé persistente. Romper hábitos toma tiempo.

    Esto no quiere decir que lo hagas desaparecer de un día para otro sin dar ninguna explicación a tu hijo. Deja de ofrecérselo y dale de beber siempre en vaso. Si te pide el biberón, al principio, no se lo niegues, pero explícale que ya es lo bastante mayor para beber igual que lo hacen los adultos y felicítale por este gran logro.

    Para que le resulte más fácil desprenderse de él, puedes decirle que vas a cambiar su viejo biberón de cuando era pequeño por un “vaso de mayor” y regálale uno bonito o ve con él a comprarlo. Cuando consiga dar este paso, tú no te quedes atrás y lleves el biberón a todas partes “por si acaso”. Si quieres llevar agua, usa una botellita.


    Casi todas las conductas de los niños son aprendidas, se apoyan en el ejemplo que les damos. Así, una actitud nuestra aparentemente inofensiva y repetida con regularidad puede llevar al niño a ser incapaz de abandonar un hábito. Lograr desprenderse para siempre del biberón no es solo una tarea del niño; tú también tienes mucho que ver.

 

Bibliografía:

http://pediatrica.org/?p=580,

http://espanol.babycenter.com

http://www.guiadelnino.com

http://www.edukame.com