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ESTRATEGIAS DE ATENCIÓN PARA APOYAR A ALUMNOS CON NECESIDADES EDUCATIVAS ESPECIALES EN EL AULA
Lic Maria Elena Anaya Meneses

Por: Lic. Maria Elena Anaya Meneses

Sabemos que un alumno tiene necesidades educativas especiales cuando presenta más dificultades que el resto de sus compañeros para acceder a los aprendizajes que le corresponde a su edad; dificultades derivadas de causas internas, dificultades y/o carencias en el entorno familiar o por una historia de aprendizaje desajustada, para compensar dichas deficiencias es necesario tener la apertura de realizar adaptaciones de acceso o curriculares significativas en las áreas necesarias del currículo educativo.

La identificación de las Necesidades Educativas Especiales (NEE) de un niño constituye el primer paso para determinar los apoyos que el alumno podrá necesitar a lo largo de su escolarización. Así mismo la escuela regular debe de brindar la ayuda necesaria ya sea temporal o permanente, para el desarrollo pleno de sus capacidades.

Por lo tanto a continuación se presentan algunas estrategias de intervención en el aula con las cuales se pretende favorecer la atención de los niños.

  • Brindarle un mayor número de experiencias variadas para el mismo aprendizaje (utilizar material didáctico multisensorial, llamativo y acorde a los intereses del niño que le permita experimentar con éxito las actividades realizadas).
  • Trabajar con él durante períodos cortos y prolongarlos poco a poco.
  • Guiar la actividad, hasta que la pueda hacer por sí solo (bajar la guía poco a poco).
  • Despertar el interés por los objetos y personas que le rodean, acercarle y mostrarle las cosas agradables y llamativas.
  • Repetir muchas veces las tareas realizadas, para que recuerde cómo se hacen y para qué sirven.
  • Disminuir el número de tareas (por ejemplo, si los demás resuelven 3 problemas, que él resuelva 1) y permitirle el tiempo necesario para desarrollarlas.
  • Aprovechar las experiencias que ocurren a su alrededor y la utilidad de las mismas, relacionando los conceptos con lo aprendido en “clase”.
  • Tener paciencia, ayudarle a que sus respuesta cada vez sean más rápidas.
  • Conducirle a explorar situaciones nuevas respetando su iniciativa (dejar que el niño haga por si mismo, ayudarle sólo lo necesario).
  • Brindarle oportunidades de resolver situaciones de la vida diaria, no anticipar ni responder en su lugar.
  • Generar que viva el éxito, secuenciar bien las dificultades.
  • Planear actividades en las cuales él sea quien intervenga o actúe como persona principal.
  • Individualizar la enseñanza (centrar las adecuaciones curriculares en la enseñanza- aprendizaje de procesos y actitudes que en asimilar principios y conceptos).
  • Sentarlo cerca de compañeros que puedan ofrecerle un ejemplo positivo a seguir.
  • Ofrecerle diversas opciones en la resolución de exámenes.

El trabajo cotidiano en el aula con un niño que necesita educación especial tal vez no sea fácil, pero tampoco es imposible, la diferencia radica en que tanto como docentes estamos comprometidos con la educación y aprendizaje del alumno, contar con el conocimiento en caso de que e requiera dar atención educativa especial y la actitud con la que la tomamos; en fin todas las respuestas a dudas e interrogantes respecto a las necesidades educativas especiales las podremos responder investigando, manteniéndonos informados, actualizándonos constantemente, preocupándonos por los alumnos y sobre todo con la experiencia que iremos adquiriendo a lo largo de nuestra profesión docente.

Recordemos que un niño con N.E.E. requiere del apoyo de los demás, sin embargo tampoco debemos caer en la sobreprotección, pues este es un error que frecuentemente se comete; el subestimar las capacidades del niño o considerarlo incapaz de realizar ciertas actividades no permitirá avances en su autonomía y seguridad personal. Por el contrario con esta actitud volvemos al pequeño inseguro y temeroso, lo que a su vez afecta su estancia en la institución educativa y su desenvolvimiento en la sociedad.

Es también importante que el maestro observe e identifique los sentimientos del niño, en este aspecto la autoestima y la aceptación juegan un papel relevante. Generalmente los infantes que precisan de apoyo educativo especial necesitan elevar su autoestima, aceptarse y ser aceptados como son, sentirse queridos y protegidos, no tener miedo a realizar distintas actividades y sobre todo comprender que su condición no es mala, que como seres humanos tienen los mismos derechos que los demás y que a pesar de no poder realizar algunas actividades, tiene cualidades que los hacen únicos y especiales.

 

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Bibliografía.

Estrategias de atención para las diferentes discapacidades,

Manual para padres y maestros, Cardona, A. Arambula, L. Vallarta, G., Trillas.